NOS Don Felipe, por la gracia de Dios Rey de Castilla… Por quanto deseamos ver reduzidos los vassayos de los nuestros Principad
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NOS Don Felipe, por la gracia de Dios Rey de Castilla… Por quanto deseamos ver reduzidos los vassayos de los nuestros Principado de Cataluña, y Condados de Rossellón, y Cerdaña a nuestra obediencia, y a su entera quietud y que queden libres de la opressión de las armas Francesas, viviendo en paz, y apartándose del error, y confusión que oy la turba para cuyo fin solo avemos formado los exércitos que han entrado en aquella Provincia.... ofrecemos perdón general a todos los vassallos, y naturales dellos, de qualquier estado, grado, condición, edad, y calidad que sean: y les asseguramos debaxo de nuestra Fe, y Real palabra, que reduzidos a nuestra obediencia, como lo estavan antes, los tendremos por perdonados de todos y qualesquier cargos, delitos, y sedición... (Al fin:) Madrid, Ju
NOS Don Felipe, por la gracia de Dios Rey de Castilla… Por quanto deseamos ver reduzidos los vassayos de los nuestros Principado de Cataluña, y Condados de Rossellón, y Cerdaña a nuestra obediencia, y a su entera quietud y que queden libres de la opressión de las armas Francesas, viviendo en paz, y apartándose del error, y confusión que oy la turba para cuyo fin solo avemos formado los exércitos que han entrado en aquella Provincia.... ofrecemos perdón general a todos los vassallos, y naturales dellos, de qualquier estado, grado, condición, edad, y calidad que sean: y les asseguramos debaxo de nuestra Fe, y Real palabra, que reduzidos a nuestra obediencia, como lo estavan antes, los tendremos por perdonados de todos y qualesquier cargos, delitos, y sedición... (Al fin:) Madrid, Juan Sánchez, 1644, 29 x 21 cm., dos hojas. (Hemos localizado ejemplares de esta obra en la Biblioteca de Catalunya, Biblioteca-Museo Víctor Balaguer y Real Academia de la Historia).
6642T3B3
1 Artículo
NOS Don Felipe, por la gracia de Dios Rey de Castilla… Por quanto deseamos ver reduzidos los vassayos de los nuestros Principado de Cataluña, y Condados de Rossellón, y Cerdaña a nuestra obediencia, y a su entera quietud y que queden libres de la opressión de las armas Francesas, viviendo en paz, y apartándose del error, y confusión que oy la turba para cuyo fin solo avemos formado los exércitos que han entrado en aquella Provincia.... ofrecemos perdón general a todos los vassallos, y naturales dellos, de qualquier estado, grado, condición, edad, y calidad que sean: y les asseguramos debaxo de nuestra Fe, y Real palabra, que reduzidos a nuestra obediencia, como lo estavan antes, los tendremos por perdonados de todos y qualesquier cargos, delitos, y sedición... (Al fin:) Madrid, Ju